Con más de 100.000 pisos okupados ilegalmente, el 99,9% en manos de bancos y fondos de inversión no es de extrañar que existan miles de procedimientos judiciales abiertos en los juzgados de toda España. A estos hay que sumar los miles de procedimientos de ejecución hipotecaria que también están en marcha y los miles que vendrán en breve en cuento la situación económica derivada del coronavirus se manifieste con toda su crudeza. Todo ello con un solo objetivo: poder recuperar la posesión del inmueble para poder ponerlo a la venta.

Bancos no pagan a los okupas para recuperar viviendas ocupadas

Creo que todos somos conscientes que recuperar un piso ocupado por la vía legal no es una opción rápida ni eficiente. Los juzgados están colapsados (el parón por el coronavirus tampoco ha ayudado a solucionar este problema precsiamente) y además los okupas conocen varias tretas legales para alargar todavía más un proceso que de media ya supera los dos años en algunos juzgados. En caso que no las conozcan, sus letrados de oficio se las explican rápidamente. La última de ellas, por ejemplo, alegar estar infectado de COVID para suspender el lanzamiento judicial y ganar unos meses más de tiempo.

métodos extrajudiciales para recuperar viviendas ocupadas por okupas

No obstante, existen otras vías para intentar recuperar la posesión que básicamente se agrupan en la categoría de “métodos extrajudiciales”. El más evidente y obvio, es sencillamente pagar a los okupas para que se vayan.

La mayoría de la población considera estas vías extrajudiciales como algo negativo puesto que en definitiva se está premiando a una persona que está cometiendo un delito y animándole a repetir la actuación. Lo gracioso es que la opinión cambia bastante cuando a ese mismo ciudadano se le pregunta si estaría dispuesto a esperar 2 años a que un juez le autorizara a entrar a su vivienda en el caso en que se la ocuparan. La respuesta es obviamente NO. Consejos vendo que para mí no tengo…

Dicho todo esto, resulta lógico preguntarse porque los bancos y fondos de inversión prefieren vender los pisos con okupas a inversores antes que intentar lograr recuperar la posesión de los activos por la vía extrajudicial (es decir, pagando a los okupas para que se vayan a otro sitio).

Esta estrategia que a priori parece muy lógica en el caso de los grandes tenedores tiene básicamente cuatro problemas:

  1. Riesgo reputacional: los bancos y fondos de inversión gestionan miles de viviendas mientras enormes bolsas de población tienen dificultad para acceder a una. Han sido catalogados como los culpables del problema del acceso a la vivienda y cualquier medida encaminada a dejar a una familia en la calle está condenada a sufrir el rechazo de una parte importante de la sociedad. Habitualmente sufren protestas en sus oficinas y están constantemente en el ojo del huracán. No es de extrañar que tengan interés en vender estos pisos ocupados lo antes posible y de la manera más discreta posible.
  2. Efecto llamada: si se corriera la voz que los bancos pagan a los okupas para que se vayan de los pisos, sufrirían ocupaciones masivas de cualquier piso que estuviera publicado con el objetivo de pedir un rescate por su liberación.
  3. Falta de agilidad: aunque recuperaran el piso tras pagar a los ocupas, no serían capaces de venderlo rápidamente y corren el riesgo que se lo vuelvan a ocupar. Estos pisos recién recuperados por los bancos se denominan “pisos calientes” y tienen altas tasas de reincidencia en la ocupación ilegal.
  4. Efecto rotación o trasvase: efecto derivado de los dos problemas anteriores. Básicamente se generaría un proceso de migración perpetua de los okupas. Ejemplo: el Banco A paga a los okupas que tras cobrar su incentivo se marchan a una casa del fondo Z. El fondo Z pagaría de nuevo y los okupas se irían a una casa del banco B, el cual pagaría para que se marcharan y los okupas acabarían en una vivienda del fondo Y y así eternamente. Como todos harían los mismo a la vez, los bancos y fondos se estarían pasando los okupas de casa en casa sin resolver el problema y asumiendo unos costes económicos muy elevados.

Por todo ello, los bancos y fondos de inversión son muy reacios a utilizar procedimientos extrajudiciales para recuperar las viviendas ocupadas de forma ilegal. Han comprendido que es preferible vender esos pisos con okupas con un descuento atractivo y que sean otros los que solucionen el problema.

En otro post analizamos también los costes derivados de mantener una vivienda ocupada ilegalmente durante dos años hasta que un banco o fondo la puede recuperar por la vía judicial. Te recomendamos la lectura, puesto que, junto a lo mencionado en este se obtiene una visión bastante clara de porqué los bancos tienen tanto interés en vender los pisos con okupas que tienen en sus balances

Una vez comprendida la situación, es donde se vislumbra esta oportunidad de inversión y donde resulta fundamental tener un acceso rápido a las carteras de pisos con okupas que los bancos y fondos quieren vender lo antes posible. Lograr conocer cuáles son estas oportunidades de inversión y ser capaces de establecer una negociación ágil resulta crucial para poder comprar estos pisos con okupas a un buen precio.

En Audentia somos expertos en negociar la compraventa de pisos con okupas y otros activos bancarios, así como en negociar con el okupa la entrega voluntaria de la posesión del activo. Si te has planteado alguna vez esta posibilidad, contacta con nosotros, te informaremos sin compromiso y te resolveremos todas las dudas que tengas.